miércoles, 5 de marzo de 2025

VICENTE NAVARRO RUÍZ, docente e ideólogo en tiempos de guerras y exilio


Vicente Navarro Ruíz fue un carcarés al que le tocó vivir en primera línea los tiempos convulsos de las guerras española y mundial. Un educador y militante político que murió en el exilio.

Firma ológrafa de Vicente Navarro

Vicente Navarro Ruíz era natural de Cárcar donde había nacido el día 28 de octubre del año 1895. Su padre se llamaba Julián Navarro Martínez y su madre Jacinta Ruíz Ciordia. El padre era de Funes, hijo de Martín y María, y vino a Cárcar a casarse con Jacinta, la hija de Pío y Rosalía. Jacinta tenía en ese momento veinticinco años y era la benjamina; Julián, por su parte, treinta y dos. 

Los padres de Vicente se casaron en mayo de 1887. Pío, el abuelo y padre de Jacinta, era propietario labrador, y siendo ella la hija pequeña se quedaron a vivir en la casa con los padres. Esta estaba ubicada en la Plazuela Baja y será aquí donde nazcan los hijos de Julián y Jacinta: Martín, Eustaquio, Jesús, Vicente, Isidora y María Navarro Ruiz. 

Seminario de los Padres Claretianos de Alagón. Foto: Centro de Estudios Borjanos.

Hacia el año 1907, cuando Vicente tenía doce años, intuyendo quizá cierta vocación, se va a formarse al seminario de los claretianos, seguramente al de Alagón, y allí recibe la formación conveniente durante los cinco cursos siguientes. En 1912, ya con 17 años, hace sus primeros votos, pero al llegar el verano siguiente, no los renueva y con toda la formación humanística recibida por parte de los frailes claretianos regresa a Cárcar diciendo a sus padres que él lo que quiere ahora es ser maestro. 

Hace entonces por libre la carrera de magisterio, ayudado por el maestro del pueblo, que concluye sin dificultad en 1921. Su primer destino como maestro nacional lo llevará hasta Aoiz. Aquí ejerce durante nueve años y conoce a la que será su esposa, Luisa Aranguren, con la que se casa en 1926. Dos de sus hijos, Alberto y Teodora (Dorita) nacieron en Aoiz. En 1930 lo destinan a Falces y le nombran director del grupo escolar. Enseguida se prepara para opositar en Madrid como Inspector de Primera Enseñanza, cosa que consigue, y se traslada con su familia a Pamplona para desempeñar este cargo. En la capital navarra nace en 1934 María Luisa (Marysa), la última de sus hijos.
 
En su calidad de inspector, Vicente Navarro fue miembro del Consejo Provincial de Enseñanza, y además se metió en política. Fue militante de Izquierda Republicana y afiliado a los sindicatos FETE (Federación de Trabajadores de la Enseñanza) y UGT (Unión General de Trabajadores), a la vez que miembro de la Liga de Derechos del Hombre, de origen masónico. En este contexto también fue nombrado, mientras la Segunda República, Secretario de la Comisión Mixta Provincial de Navarra, organismo creado por la Dirección General de Enseñanza. Uno de los principales objetivos de esta comisión era la de prohibir y apartar la religión de las aulas.

En 1934 presidió, por el partido de Estella, la asamblea de maestros dejándose notar su presencia con asiduidad en este tipo de reuniones. Cuando estalló la guerra civil se le destituyó de su cargo de inspector y su plaza de docente pasó a situación de maestro en excedencia. 

A los tres días de iniciada la contienda huye a Francia, pero regresa enseguida pasando la frontera por Irún en dirección a Bilbao, todavía en manos republicanas. En Bilbao retoma el cargo de Inspector de Primera Enseñanza y vocal de la dirección de UGT de Navarra en Vizcaya, formada por evadidos. Para el año siguiente le fueron incoados sendos expedientes de responsabilidades políticas y depuración, este último por parte de la nueva Junta Superior de Educación. Mientras tanto, a Luisa, su mujer, y a sus hijos los recluyeron en distintos conventos de Pamplona hasta ser canjeados por otros niños navarros que habían quedado en San Sebastián al inicio de la guerra. De este modo se pudieron reunir con el cabeza de familia en Bilbao. 

Vapor Habana. Foto: Santurtzi historian zehar

Vicente Navarro colaboró en 1937 en la evacuación de los niños de Bilbao que estaba llevando a cabo el gobierno vasco, los llamados “niños de la guerra”. Dorita fue evacuada también junto con otros cuatro mil quinientos niños en el vapor Habana que salió de Santurce con dirección a Burdeos. Aquí quedaron tres mil de esos niños que fueron repartidos entre Francia e Inglaterra; el resto zarpará en otro barco con destino a Rusia; entre estos iba Dorita, que permanecerá allí por un período de diez años.

Huyendo de nuevo, Vicente, su mujer y el resto de sus hijos se refugian en Santander donde trabajará en la Inspección de Enseñanza, aunque solo por unos meses. Ante la inminente llegada de las tropas nacionales, escapa de nuevo a Francia dejando a la familia, regresando más tarde, esta vez por Valencia, donde estaba instalado el gobierno de la República. 

Cuando a principios del año 1939 el ejército republicano fue derrotado, huyó ya Vicente definitivamente de España y pasó otra vez a Francia. En 1940 el Tribunal Regional de Responsabilidades Políticas de Navarra emitió sentencia condenando a Vicente: “por ostentar el cargo de inspector de 1ª enseñanza de Navarra en representación del Frente Popular, significarse por su marcada ideología izquierdista y salir de la zona republicana durante la Guerra Civil y permanecer en el extranjero más de 2 meses”, considerando por todo ello al acusado “elemento destacado y peligroso por su marcado sectarismo izquierdista” condenado a pagar al Estado en concepto de indemnización por perjuicios la cantidad de cinco mil pesetas y la inhabilitación para el ejercicio de su cargo de maestro por un período de quince años. 

Iniciada la Segunda Guerra Mundial este maestro carcarés fue confinado en varios campos de concentración franceses hasta conseguir finalmente reunirse con su familia en Bayona, gracias a las gestiones del gobierno vasco en el exilio. En las afueras de Bayona dirigió Vicente una colonia de niños refugiados españoles hasta instalarse más tarde en un pueblo cercano donde vivieron lo que restaba a los turbulentos años de la guerra mundial. 

Acabada esta se traslada con su familia a Biarritz donde se hace cargo de una escuela de la República, reactivándose también la actividad política de los exiliados. Vicente había formado parte del Gobierno Provisional de Euskadi, en calidad de vicepresidente de la Comisión Gestora de Navarra, siendo Jesús Monzón su presidente, y ahora se creaba el Consejo de Navarra en el exilio, donde es nombrado también secretario de esta entidad. 

Marysa Navarro Aranguren, en la Universidad Pública de Navarra. Foto: UPNA

Como Vicente albergaba esperanzas de volver a España, mientras su estancia en Francia envió a su hija Marysa a Navarra para hacer el ingreso y el examen por libre al Bachillerato. También mantenían de algún modo contacto con la familia, ubicada ya en Funes, que en más de una ocasión los fueron a visitar a la frontera; pero como Vicente no veía momento de regresar a su tierra y los problemas de tipo económico apretaban, en cuanto pudo recuperar a su hija Dorita que estaba en la Unión Soviética, emigraron todos a Uruguay.

Una vez en Uruguay Vicente pudo volver a la docencia, pero allí no se le reconocieron sus títulos por lo que, paradójicamente, solo la pudo ejercer en instituciones religiosas. Nunca regresó a España, murió en Uruguay el 17 de diciembre del año 1964. Luisa, su mujer, vivió hasta 1984 y ella si que viajó a España varias veces, pero solo de visita.

Por otro lado, esa preparación de la que había gozado su hija pequeña en España, y los viajes periódicos que hacía a Navarra, a donde era enviaba por sus padres en período vacacional para ver a su familia, contribuyó a que ésta siguiera una relación afectiva con la tierra de sus orígenes.

La doctora Marysa Navarro dando una conferencias en Dartmouth

Marysa recibió una amplia formación académica, doctorándose en Historia por la Universidad de Columbia en los Estados Unidos, logrando en 1967 el puesto de profesora en una prestigiosa universidad de Nueva Inglaterra. Experta en la vida de Eva Perón, ha sido también escritora e historiadora especializada en la Historia del feminismo, la historia de las mujeres en Latinoamérica, y la Historia de América Latina. Ha sido también miembro de varios consejos editoriales, conferenciante de prestigio y propuesta por el Consejo Navarro de Cultura para el premio Príncipe de Viana del año 2017. Ese mismo año fue investida doctora honoris causa por la Universidad Pública de Navarra. Desde su jubilación ha trabajado como investigadora residente del Instituto David Rockefeller de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Harward, y ha sido profesora emérita de Historia por la Universidad de Dartmouth.

Marysa Navarro, primera doctora honoris causa investida por la Universidad Pública de Navarra, junto al rector de la misma, Alfonso Carlosena. Año 1917. Foto navarra.com

En la madrugada del día 2 de marzo de este 2025 (hace exactamente tres días) Marysa, esta destacada figura de la docencia universitaria americana, historiadora y literata de prestigio, hija del carcarés Vicente Navarro Ruíz, acaba de fallecer en la ciudad norteamericana de Cambridge (Massachussetts). Su amplio y destacado currículo se puede consultar con profusión en abundantes medios de comunicación en los que se destaca la importancia de su labor docente y literaria. 

María Rosario López Oscoz

 

Fuentes:

-Archivo Municipal de Cárcar
-Archivo Histórico de Euskadi
-familysearch.org
-navarra archivos.es
-GARCÍA-SANZ MARCOTEGUI, Ángel. "Marysa Navarro Aranguren". Universidad Pública de Navarra. Año 2014. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5034934
-MIQUELARENA PEÑA Fernando. “Tormenta sobre la inspección. La represión franquista contra los inspectores de primera enseñanza en Navarra”. Año 2016. https://zaguan.unizar.es/record/70622/files/texto_completo.pdf
NAVARRO ARANGUREN Marysa. Recuerdo del exilio. 2017. http://viejo.revistabravas.org/article/75/recuerdos-del-exilio  
-SEBASTIAN GARCÍA Lorenzo. “El primer gobierno vasco (1936-1937) y Navarra”.
-https://www.cronicasdelaemigracion.com/articulo/cronicas/marisa-navarro-analiza-estado-laico-derechos-mujeres-buenos-aires/20100628145137020047.html