La parroquia San Miguel de Cárcar conserva una antigua arqueta entre su patrimonio. Se la venía denominando arqueta-relicario porque al parecer en su interior se custodiaban las reliquias de Santa Bárbara, pero los expertos actuales aseguran que se trata de una arqueta nupcial, es decir, una pieza hecha para que el novio obsequiara a la novia en sus esponsales, quizá para contener las arras. Esto agranda el enigma que genera esta valiosa pieza, y surgen preguntas que hasta el momento no tienen respuesta: ¿Quiénes serían esos novios, seguramente principales, y por qué y cuando la donaron a la parroquia?
Esta pieza fue sometida hace cincuenta años a su estudio y restauración. Del resultado de esta intervención quizá quede documentación, pero lo cierto es que como no ha trascendido, nos quedamos sin saber todo lo que da de sí esta joya artística; unos dicen que si es del siglo XV, otros que del XIV. Incluso, hay quien arriesga más y la sitúa en el siglo X. Esto último lo afirma el autor de la antigua novena a la Virgen de Gracia (no consta su nombre) que en el ejemplo del día séptimo dice lo siguiente: “precioso relicario del siglo X traído de Oriente en tiempos de las cruzadas que constituye el mejor tesoro de la parroquia”.
Seguramente esta datación no será tenida en cuenta ya que los expertos apuntan a que la pieza es de estilo gótico tardío y de tiempos del rey navarro Carlos III el Noble, por lo cual sería de finales del XIV o principios del XV. La talla está hecha de madera y hueso. De este último material serían las figuras femeninas colocadas a través de los cuatro lados de la arqueta. Dice el Catálogo Monumental de Navarra que estas figuras aparecen: “agrupadas por parejas o de tres en tres, excepto en los extremos donde aparecen solas. Algunas de ellas portan ramas o filacterias, y en el centro del frente principal se sustituyen por una pequeña torre”. En el interior de la torre hay un centinela con casco que sería la única figura masculina del conjunto. Continúa diciendo el Catálogo Monumental: “La cubierta de la arqueta aparece decorada por ángeles, motivos geométricos y dos escudos que se sitúan en los frentes menores”. El estudio de estos escudos habría permitido conocer las dos casas nobles que se unían en aquellos desposorios, pero, a día de hoy, estos escudos se encuentran desgastados o borrados por lo que resultará casi imposible aventurar nada, salvo que en algún lugar de la arqueta, oculto a la vista, se encuentre rastro del artífice o procedencia.
Como ya he apuntado, en el año 1973 los responsables de Arte y Patrimonio del Arzobispado se la llevaron a Pamplona para estudiarla. El párroco de ese momento, don Ángel Garrido Zudaire, estuvo siempre pendiente de su estado y situación. Para el 7 de agosto de ese mismo año la reclamaba por carta porque la quería tener para las fiestas patronales de la Santa Cruz (14 de septiembre). Uno de los responsables de la Comisión Diocesana de Arte, Jesús María Omeñaca, le respondía con otra misiva en nombre del responsable máximo, Miguel Iráizoz, y le decía que para poderla estudiar mejor “es preciso previamente llevar a cabo una restauración de la misma que deje patentes algunas de sus partes más ocultas”. Y añadía: “Dicha restauración, por otra parte, haría aparecer en toda su belleza el conjunto artístico de la misma”. También le hacía saber que el especialista encargado de la restauración se encontraba todo el verano fuera de Pamplona por lo que la cosa se iba a alargar.
Y ciertamente que se alargó. Don Ángel se impacientaba, y periódicamente escribía al Arzobispado apremiándoles. El 16 de abril del año 1975 (dos años después) volvía a reclamarla; diez días más tarde contestaba Miguel Iráizoz asegurando que el responsable de dicha restauración “Sr. Navascués no la ha terminado todavía, pese a nuestras reiteradas insistencias. Le hemos llamado hoy para rogarle que la termine la próxima semana, indicándole que si no lo hace procederemos a recogerla tal y como esté”.
Veintiún días después vuelve Iráizoz a escribir a don Ángel: “Como continuación a mi carta anterior le participo que hemos visitado al artífice que está restaurando la arqueta de esa parroquia. El trabajo lo lleva muy adelantado, pero aún tardará algún tiempo en terminarlo, ya que se trata de una labor muy minuciosa y delicada. Hay que recomponer algunas piezas. Si viene V. por aquí algún día se la podremos enseñar”.
Pasó todo el año de 1975, y para el verano siguiente la arqueta seguía sin volver a Cárcar. La feligresía se impacientaba y también el Consejo Parroquial. Incluso se empezó a desconfiar del párroco. Pero don Ángel no tenía la culpa. El 10 de agosto este se volvía a poner en contacto con los responsables de su restauración, para apremiarles una vez más, y dar cuenta de las quejas que por ese motivo le participaban sus feligreses. El 3 de septiembre llegará la respuesta por medio del secretario de la Comisión de Arte Sacro de la Diócesis, de nuevo el señor Jesús María Omeñaca. Pero el señor Omeñaca no le iba a dar la alegría a don Ángel que esperaba: “En cuanto al asunto concreto de la arqueta, tengo el gusto de comunicarle que se encuentra en proceso de restauración (noticia fresca). El profesor que se ocupa de ello solo puede dedicarle ratos durante el curso académico, por lo que puede explicarse la tardanza, que puede parecerle excesiva, pero que nos parece preferible a realizar una labor menos garantizada”. Así que de nuevo se posponía sine die la vuelta de la arqueta a la parroquia.
No obstante, y para evitar suspicacias, añadía: “De todos modos, quiero decirle para su tranquilidad y la de sus feligreses que en todo este tiempo de intervalo está depositada y expuesta en el MUSEO DIOCESANO de la Catedral de Pamplona, donde pueden verla en las horas de visita, tanto Vd, como cualquiera de sus feligreses que lo deseen. El lugar exacto es una vitrina de la SALA DE PINTURA de dicho museo”.
No hay más correspondencia al respecto, por lo que se supone que ante la insistencia ejercida se aceleraría el proceso de restauración y la arqueta regresaría finalmente a su lugar de origen: la parroquia San Miguel de Cárcar.
El fieltro rojo con el que se cubrió en sus distintas partes sería la más llamativa de las actuaciones.
En septiembre de este año de 2025 se van a cumplir seiscientos años del fallecimiento del rey Carlos III el Noble, y para conmemorar el acontecimiento el Departamento de Cultura del Gobierno de Navarra va a llevar a cabo distintas exposiciones, ciclos de conferencias y publicaciones. Una de las piezas que van a ser expuestas al público será la arqueta nupcial de Cárcar, de nuevo tras previo estudio y restauración. Los tratamientos de restauración que se le van a aplicar a la arqueta se podrán ir viendo desde los talleres de restauración de dicho Departamento. Se dice que en nota de prensa que “durante los meses previos al inicio de la muestra se han organizado visitas guiadas para que las personas interesadas puedan conocer de primera mano las tareas de restauración de algunas de estas piezas”.
Es deseable pues que tras su restauración sean muchas las personas que puedan disfrutar en todo su esplendor de esta joya artística; que la conozcan y la admiren, y que gracias a esa restauración, y a las que se sucedan en el futuro, la sigamos conservando al menos por otros seiscientos años más.
María Rosario López Oscoz
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Agradecer a Juan Ignacio Fernández García por facilitarme las fotografías incluidas en este trabajo.
-Archivo parroquial de Cárcar
-GARCÍA GAÍNZA María Concepción y otros. Catálogo monumental de Navarra II. Merindad de Estella. Año 1982. Pag. 402
-Novena a Nuestra Señora la Virgen de Gracia. Imprenta Tudelana
-https://www.navarchivo.com/es/c%C3%A1rcar
-https://www.navarra.es/es/-/nota-prensa/el-gobierno-de-navarra-conmemora-en-2025-el-vi-centenario-del-fallecimiento-de-carlos-iii-el-noble?pageBackId=7574878&back=true
Gracias Charo por tu incansable trabajo.
ResponderEliminarUn placer. Y gracias a ti por tu apoyo y colaboración al facilitarme las fotografías
EliminarGracias por toda la información , pero si no es por la insistencia de años , hoy no la tendríamos ,y sería una pena
EliminarAsí es, Gracia...
EliminarQue bonita!!. Gracias Charo por acercarnos ese tesoro que tenéis en Carcar.
ResponderEliminarEs necesario dejar este legado a las nuevas generaciones. Muchas gracias por comentar, saber que hay gente detrás apoyando anima a seguir. ¡Saludos!
Eliminar👍👍👍
ResponderEliminarMuchas gracias anónimo por tu aprobación y apoyo
EliminarMuy bien Charo. Nos aclaras algo que desconocíamos. Ya nos informarás de cuando podemos verla por Pamplona.
ResponderEliminar"La exposición servirá, también, para mostrar la intervención que se realizará en varias piezas que van a formar parte de la muestra. Así, se profundizará en el estudio previo a los tratamientos de restauración que se van a aplicar en obras tales como el arca de la Virgen del Puy, la arqueta nupcial de Cárcar, o varias piezas de diversa procedencia de yacimientos arqueológicos que nos ayudan a comprender el contexto material en el que se desarrollaba la vida bajo el reinado de Carlos III, hace 600 años.
EliminarDe hecho, durante los meses previos al inicio de la muestra se han organizado visitas guiadas para que las personas interesadas puedan conocer de primera mano las tareas de restauración de algunas de estas piezas. Las visitas, previstas para grupos reducidos, se realizarán los jueves y viernes del mes de junio en horario de 12:00 a 13:00h".
Esto es lo que se dice en la nota de prensa del día 11 de abril de 2025. Este es el enlace: https://www.navarra.es/es/-/nota-prensa/el-gobierno-de-navarra-conmemora-en-2025-el-vi-centenario-del-fallecimiento-de-carlos-iii-el-noble